True North, el álbum más reciente de Bad Religion, es también el álbum 16 de su carrera.
Con éste, logran retomar la continuidad de sus discos de Punk más duro, que se perdió después de The Empire Strikes First. Dissent of Man, su album anterior, no alcanzó las expectativas generadas por los fans de Bad Religion, por considerarlo más un album de Rock que de Punk, por lo que True North llega como bocanada de aire fresco para los que esperaban un regreso a las raíces de la banda.
De hecho, es un álbum que puede compararse a sus primeros discos; un Punk Melódico con canciones rápidas y melodías pegajosas con letras inteligentes. Punk más apegado a la tradición de The Clash y Dead Kennedys que al happy punk que ha tenido más éxito comercial.
Bad Religion se ha caracterizado siempre por expresar abiertamente su rechazo a la religión, sus inquietudes políticas y no son infrecuentes las críticas a la sociedad conformista y de consumo. Estos temas podrían parecer trillados en una banda de adolescentes, pero Bad Religion es una banda de personas que rondan los 50, y siguen mostrando el mismo descontento juvenil desde una perspectiva más madura.
En un mundo donde las bandas tienden al autoplagio o a la fórmula recurrente para el éxito en la radio, éste disco es de agradecer. Afortunadamente Bad Religion no son los Rolling Stones ni se volvieron música para adulto contemporáneo.
35 minutos de punk melódico distribuidos en 16 canciones de 2 minutos de duración, entre las que sobresalen “Fuck you”, simple como suena, tiene el mérito de explicar esa sensación que solo puede expresar una frase, por cruda que se escuche. “Hello cruel world” es la canción más lenta del disco, quizá la más introspectiva, esa que expresa la desolación o la desesperanza. “True North” además de dar nombre al disco, expresa un poco de la esperanza de encontrar un rumbo, cuando el rumbo marcado por el mundo no parece tener mucho sentido para uno.
En “Popular Consensus” establecen que “popular consensus doesn’t make it right”, sin embargo en esta ocasión no se aplica, ya que True North ha sido un álbum bien recibido por la crítica y por los fans. Es definitivamente un disco que vale la pena escuchar detenidamente, y es también un disco que vale la pena no escuchar detenidamente y sólo dejarse llevar por la melodía rápida, cruda y energética que es el Punk.
Texto: Claudia Ramírez